Más de una vez pasó que estamos mirando una película y en el éxtasis de la persecución de turno, o en el momento del desenlace, ocurre un hecho que nos deja con una sensación extraña, una resolución poco creíble, una acción que no nos termina de cerrar. Y pensamos “¡Nah! ¡Esto es malísimo!, ¡que mentira!, ¡son re exagerados!, ¡como puede ser que se salven así!, ¡eso de donde lo sacaron!”. Pero cuidado, porque no estoy hablando de baches argumentales que puede sufrir una historia, sino de acciones puntuales o “vueltas de tuerca” forzadas para llevar la trama a donde quiere el autor.
Voy a un ejemplo puntual. La Momia Regresa (o La Momia 2), con un Brendan Fraser que ya se estaba empezando a poner gordo. La película está llena de errores de este tipo, pero uno que realmente me pareció imperdonable fue en la escena que tienen que entrar rápido a la pirámide antes de que salga el sol, o sino el hijo (que no recuerdo su nombre) moría debido al brazalete del Rey Escorpión que tenía en el brazo. La escena muestra como se eleva el sol en el horizonte, mientras, curiosamente, la luz se mueve tras de ellos arrimándose como un charco de agua de una pileta que se rebalsó. Algo físicamente imposible. El sol empieza a asomar su luz desde los puntos más altos para descender, no desde abajo para ascender.
Tal vez para muchos este error pase desapercibido, pero en cuento lo vi realmente me molesto. Fue algo que me incomodó y que, si bien ya de por si la película es mala por decenas de escenas anteriores, ver ese error físico me descoloco, y ya me sentí completamente ajeno a la historia.
Cuando uno plantea un universo para situar una historia allí, debe ser cuidadoso. Y al decir “universo” no hablo del plano espacial para hacer una película de ciencia ficción, sino de crear todo los detalles del mundo donde se desarrolla la trama, sus personajes, sus acciones y sus reglas. Aquí es donde quería llegar. Las reglas que se deben establecer para que el desarrollo del argumento no se “pise” a sí mismo, y no haya incoherencias como las de La Momia 2 y muchas otras.
Pero este detalle lo extenderé mejor en la segunda parte del artículo. Y como toda buena historia con secuelas planeadas, uno debe dejar un buen pie para continuar contando…
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